El amor de Dios es desinteresado, incondicional, constante y puro; no espera nada a cambio y es inalterable, a diferencia del amor humano que es egoísta y siempre espera favores a cambio, y depende del trueque de «dar y recibir».
Sri Madhusudan Sai
El amor de Dios es desinteresado, incondicional, constante y puro; no espera nada a cambio y es inalterable, a diferencia del amor humano que es egoísta y siempre espera favores a cambio, y depende del trueque de «dar y recibir».
Sri Madhusudan Sai
Sé como Swami, deja que ese sea tu único propósito en la vida. Deja que esa sea tu única meta. Todo lo demás se pondrá...
En el momento en que ve la unidad en todo lo que le rodea, experimentará una gran sensación de alegría y desapego, que...
El sacrificio solo es el camino hacia la inmortalidad, y solo aquellos que llevan vidas de sacrificio son inmortales...
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