El esfuerzo del hombre y la gracia de Dios son necesarios para el éxito de cualquier empresa. Para poder atraer la gracia de Dios, debes realizar la acción sin ningún ego ni apego, y sin ningún sentido de hacedor. Cuando tu ego se borre totalmente y se convierta en cero, entonces Dios estará a tu lado, agregando valor a ese cero. El cero se multiplicará en diez, cien, mil, lakh y, finalmente, un crore en valor, a medida que te rindas más y más.

Sri Madhusudan Sai